Cuándo
hacer mamografías?
Respuesta al
informe de la United States Preventive Services
Task Force.
Octubre 2009
Ante
la publicación en los Anales de Medicina Interna
sobre el informe de la United States Preventive
Services Task Force (USPTF) en el que recomiendano
realizar estudios mamográficos de detección de cáncer
de mama a las pacientes entre 40 y 50 años y de
retardar la frecuencia de los estudios a cada dos
años luego de los 50 años, asumimos el compromiso
de informar a la población general que avalando
los conceptos de la Sociedad Americana del Cáncer
(ACS) y de la Sociedad Internacional de Imágenes
Mamarias (SBI) seguimos recomendando lamamografía
anual y el examen clínico a todas las mujeres comenzando
a los 40 años.
Ya
en el 2003 los expertos de la ACS revisaron los
mismos datos que estudió la Task Force y llegaron
a conclusiones diferentes. No ignoramos que algunos
cánceres puedes ser pasados por alto o que se pueden
provocar falsas alarmas. Estas limitaciones son
más importantes en el grupo de los 40 que en los
50 y en éstos con respecto a los 60. O sea que la
efectividad del test aumenta con la edad. Pero esta
limitación no cambia el hecho de que el screening,
comenzando a los 40 años, salva vidas. La ACS reconoce
las limitaciones de la mamografía y está abocada
a incorporar nuevas tecnologías para lograr mayor
certitud diagnóstica y además es permanente su compromiso
en la búsqueda y evaluación de nuevos test.
La
ACS reconoce que los pacientes del grupo 40-50 tienen
15% menos de incidencia del cáncer que los del grupo
50-60 y no por eso las va a condenar a padecer un
cáncer de detectado tardíamente con todas las implicancias
que se merece.
Enfatizando
el concepto anterior, hasta el momento, no se acepta
que exista a los 50 años una mágica barrera biológica,
que separe grupos con distinto riesgo. Puntualmente
en esa etapa de la vida, la mujer entre los 40 y
50 años, está cumpliendo un rol trascendente como
eje del grupo familiar, con hijos adolescentes y
su falta sería de un impacto social difícil de superar.
La
tecnología utilizada hoy es mucho más confiable,
que la revisada en el trabajo consultado.
El
staff médico de expertos de la ACS declara que con
las nuevas tecnologías, los beneficios del screening
del grupo de 40 a 50 años, superan ampliamente sus
limitaciones.
La
Task Force no asume reconocer los beneficios logrados
con la detección temprana por el programa de screening
que en la mayoría de los casos se solucionan con
la extracción de una pequeña porción de la mama
en contraposición de la mutilantes cirugías acompañadas
con quimioterapia y la consiguiente angustia personal
y del entorno familiar, sin mencionar los altísimos
costos comparativos.
Es
significativo que el modelo computado utilizado
por la Task Force nunca fue sujeto a la crítica
de expertos de sociedades afines al cáncer de mama,ignorando
a su vez, todos los estudios publicados con grandes
cantidades de pacientes y avalados con evidencias
científicas que contradicen sus conclusiones.Es
sugetivo, además, que aceptan estudios que fueron
denostados oportunamente por deficiencias técnicas
groseras.
La
Task Force descartó la literatura que no valoró
a la mortalidad como conclusión final.
Por
lo tanto, las desventajas de la morbilidad, o sea
la severidad del tratamiento en el cáncer bien constituido,
tampoco fue considerada.
Tampoco
menciona, la Task Force, las últimas estadísticas
de Holanda y Suecia que demuestran que la mejora
de la sobrevida de los últimos veinte años se atribuye
mucho más a la detección temprana que al tratamiento
instituido.
En
Suecia a expensas del screening el índice de sobrevida
en el grupo de los 40/50 años, llegó al 40%.
Otro
tema tratado, contrario a la evidencia, fue focalizar
a las pacientes con “alto riesgo”, permitiendo su
pesquisa a más temprana edad, para que en el grupo
general “no hubiera pérdida de vidas”. Esto es insuficiente
pues se ignoraría el 80% de los cánceres que ocurren
en pacientes sin factores de riesgo.
En
resumen, sorprende que un grupo de epidemiólogos
lancen al público general sus conclusiones, sin
haber convocado a expertos en detección y diagnóstico
en cáncer de mama, descartando los estudios masivos
realizados en la materia, y diseñando sus propios
modelos.
Es
nuestra obligación ante la sociedad mostrar nuestras
evidencias que ya fueron discutidas profundamente
y que contradicen lo enunciado por la Task Force.
Prof.
Román Rostagno
Presidente Club de la Mama
Pte. Electo Soc.Iberoamericana
Imagenología Mamaria
Consensuado con la Sociedad Argentina de Radiología
Artículo publicado en La Nación |